La alimentación es importante pues la cura del acné no solamente se produce en la piel, sino también "desde dentro hacia fuera" de tu cuerpo. Existen determinados alimentos que ayudan a tu cuerpo a combatir el acné. Las carnes blancas y rojas, así como las habas, el pan y arroz integral aportan vitamina B y zinc, y frutas y legumbres frescas aportan vitamina C.
Pero las frutas no solamente ayudan en el proceso de curación interno sino también externo. Las frutas son económicas y altamente eficaces, y por eso puedes beneficiarte de sus propiedades preparando mascarillas que, de forma natural, te ayudarán a eliminar el acné aplicándolas una o dos veces por semana. Son fáciles de preparar y adecuadas para todo tipo de piel.
La mascarilla de papaya es una buena opción como un tratamiento antiacne. Para elaborarla, haz un puré con media fruta madura y mezcla con dos cucharadas de miel. Aplica en el rostro de quince a veinte minutos y enjuaga bien con agua. La papaya ayuda a combatir la oleosidad de la piel, y cuando sufres quemaduras solares, puedes utilizar esta mascarilla fría para calmar la piel.
Otra opción es la mascarilla de limón y miel, pues tiene la propiedad de secar los granos y espinillas, eliminándolos poco a poco. Para prepararla, exprime medio limón -también puedes utilizar naranja-- y mezcla con dos cucharaditas de miel. Aplica en el rostro, deja de quince a veinte minutos y lava con agua. Luego puedes aplicar crema hidratante para mantener la piel suave y fresca. Esta mascarilla te ayudará a desintoxicar la piel.
Una tercera opción tiene como base camomila y arcilla verde, muy usada en la estética facial en los grandes centros estéticos. Coloca en una olla 250 ml de agua, deja hervir y agrega dos cucharadas soperas de arcilla medicinal, media cucharada de azufre y una cucharada de camomila. Aplica la máscara cuando todavía esté tibia y déjala por 15 minutos. Después utiliza un hidratante facial adecuado a tu piel.
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